Lanzó una campaña antes del torneo con el objetivo de despolitizar a la amarelinha, como se conoce el kit en Brasil. Si una elección presidencial profundamente polarizada no fue suficiente para dividir a los brasileños, Qatar 2022 plantea una nueva prueba: usar o no la camiseta de la Canarinha. Al lanzamiento del uniforme asistieron jugadores, estrellas del pasado y personalidades brasileñas.