Los ‘Bianconeri’ junto con Adidas cambiaron la identidad de su equipación de casa antes del comienzo de la temporada cuando se deshicieron de sus rayas regulares. Esta cifra superó los 90 185 espectadores que tuvo la final del Mundial de fútbol femenino de 1999, disputada entre Estados Unidos y China en el Rose Bowl de Pasadena. La ventaja de la serigrafía es que dura mucho tiempo, su acabado opaco es de óptima calidad y barato.